Cansat Argentina: ya se lanzaron los picosatélites diseñados por estudiantes de secundaria

POR Luciana Mazzini Puga para AGENCIA DE NOTICIAS CIENTÍFICAS UNQ

Los lanzamientos se realizaron en la central espacial de la CONAE, ubicada en Córdoba, a bordo de un cohete de 1,10 m de altura y 80 mm de diámetro. La Agencia de Noticias Científicas estuvo presente.

Este martes finalizó la competencia Cansat Argentina con el lanzamiento de los picosatélites (de tamaño chico) diseñados y puestos en funcionamiento por estudiantes de secundaria de Córdoba, Misiones, Formosa y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Realizados desde la central espacial de la Conae en Córdoba, los lanzamientos fueron a bordo de un cohete de la empresa SKYTEC de 1,10 m de altura y 80 mm de diámetro. El evento contó con la presencia del ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, y del director ejecutivo y técnico de la CONAE, Raúl Kulichevsky. La Agencia de Noticias Científicas de la UNQ fue testigo de este acontecimiento y trajo la experiencia a sus lectores y lectoras.

Cansat es una iniciativa internacional impulsada por varias agencias espaciales del mundo –entre ellas, la NASA de Estados Unidos y la ESA de Europa–, que propone a estudiantes de escuelas secundarias construir una carga útil del tamaño de una lata de gaseosa (de allí el término, CAN –lata– y SAT –satélite–) y lanzarlo en un cohete. Cansat Argentina propuso reproducir a escala el proceso de diseño, construcción, prueba, lanzamiento y operación de un dispositivo similar a un satélite. Esta fue la primera edición nacional que organizó la Conae, en conjunto con el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.

Los picosatélites Cansat fueron lanzados en el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la Conae en Córdoba. Créditos: Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación

En diálogo con esta Agencia, Filmus afirmó que “un país que quiere tener un proyecto espacial y ha recuperado el proyecto satelital y el lanzador Tronador como lo ha hecho Argentina, necesita formar conciencia”. En ese sentido, el ministro contó que uno de los objetivos de la competencia Cansat es despertar vocaciones tempranas en los jóvenes “para que elijan carreras que permitan tener profesionales en un área compleja y de mucha competitividad internacional”.

Tecnología espacial, problemas locales

Los picosatélites Cansat fueron lanzados en un cohete y, una vez alcanzado su apogeo (hasta 300 m de altura), se desprendieron y comenzaron a cumplir sus misiones según cada caso. Allí, las y los estudiantes realizaron sus pruebas y mediciones, con el acompañamiento de profesionales de la Conae y la UTN.

Entrevistada por esta Agencia, la estudiante del equipo cordobés “ElectroSix”, Abril Carballo, cuenta que las funciones de su picosatélite son “censar presión, temperatura, dióxido y monóxido de carbono”. Esto responde a un problema ambiental que existe en su ciudad, Justiniano Posse: “es una zona industrial, donde tenemos basural y planta de reciclaje a cielo abierto, por lo que vivimos incendios de manera frecuente. A futuro, tenemos pensado proyectos que generen conciencia sobre lo que nos producen estos incendios e industrias, y todo será gracias a nuestro picosatélite sanSat-6”, detalla.

Los equipos finalistas de la competencia Cansat Argentina en el Centro Espacial Teófilo Tabanera de la Conae. Créditos: Conae

Por su parte, Emanuel Durks del equipo Ad Astra de Misiones, destacó que la misión de su picosatélite es la dispersión de la sustancia yoduro de plata. Sin embargo, luego advirtió: “Se trata de una demostración técnica porque esta sustancia resultó inaccesible por el costo. De todas maneras, pudimos realizar la dispersión y recopilar los datos. Estamos felices”.

Respecto del yoduro de plata, explica que su función es la “inseminación de nubes para el control de granizo”. “Misiones es una zona agrícola y las nubes de granizo tienden a hacer destrozos en los cultivos, como el tabaco y el maíz. Lo que nosotros pensábamos hacer es la inseminación de las nubes para que, en lugar de que caiga granizo, llueva”, especificó el estudiante.

En camino a la soberanía espacial

“Uno de los objetivos de este gobierno es consolidar la conciencia respecto de que Argentina es uno de los diez países del mundo que puede fabricar sus propios satélites y colocarlos en el espaciosubrayó Filmus a esta Agencia, y continuó: “El gobierno recuperó todo lo que se había construido del 2003 al 2015 y que luego se dejó totalmente de lado”.

Además, resaltó el espíritu federal que acompañó a esta competencia, en la que “se han expresado cientos de estudiantes y sus profesores de escuelas de todo el país y los premios representan a distintas provincias. Los chicos de distintos lugares pusieron en práctica los conocimientos que aprendieron de la escuela y mostraron la capacidad que tienen”, subrayó el ministro.

La competencia Cansat arrancó en junio de este año y contó con 850 equipos inscriptos de colegios secundarios de todas las provincias del país. Los equipos ganadores fueron el Instituto Técnico San José de la ciudad de Justiniano Posse, Córdoba; la Escuela Técnica N°9 D.E 7 “Ing. Luis A. Huergo” de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; el Instituto Técnico Salesiano Villada de la  ciudad de Córdoba; la Escuela Provincial de Educación Técnica N° 3 de la ciudad de Pirané, Formosa; y la Escuela Provincial de Educación Técnica N° 18 de la ciudad de Puerto Esperanza, Misiones.

Fuente: Agencia de Noticias Científicas UNQ 

El funeral, un ritual muy humano

Velorio, entierro, exequias, sepelio, servicio funerario, inhumación, velatorio, honras fúnebres, sepultura, son algunos de los términos con los que nos referimos a uno de los ritos más importantes, y el más significativo, para los seres humanos de todas las culturas.

Aunque las teorías evolutivas demuestran que compartimos ancestros con otras especies animales, hay ciertos rasgos y prácticas que nos hacen especiales, separándonos del resto de los seres vivos. Hay animales que se ven afectados ante la muerte de algún integrante de su manada. Por ejemplo, los elefantes parecen adoptar comportamientos de “duelo y consuelo” e incluso parecen darse cuenta de que lo sucedido es irreversible. Sin embargo, ninguna especie honra a sus muertos como lo hacemos los seres humanos, a través de rituales de diferente complejidad según las culturas y las diferentes prácticas heredadas de nuestros ancestros. 

Establecer desde cuándo los seres humanos comenzamos a realizar estos rituales puede ser todo un desafío. En un yacimiento llamado “La Sima de los Huesos de Atapuerca” descubierto en Burgos, España, se encontraron huesos de 28 individuos diferentes de la especie Homo heidelbergensis, una especie anterior a los neandertales que habitó la zona hace aproximadamente 400.000 años. Investigadores involucrados en los hallazgos afirmaban que se trataba de “el primer santuario de la humanidad” y de “la prueba más antigua de un comportamiento funerario y de una acumulación colectiva” de restos fósiles humanos. El descubrimiento junto a los restos óseos de un hacha de mano realizada con materiales que no estaban disponibles en la zona, reforzó estas hipótesis al ser interpretado simbólicamente como un tipo de tributo hacia esos muertos.

Reconstrucción del enterramiento neandertal de La Chapelle-aux-Saints, Francia, el primero que se atribuyó a una especie distinta de los sapiens. Créditos: V. MOURRE

Otro yacimiento sorprendente fue descubierto en 2013 a unos 50 kilómetros de la ciudad sudafricana de Johannesburgo. Se trata de la cueva Rising Star, donde se encontraron restos de 15 individuos de distintas edades y de ambos sexos de la especie Homo naledi, datados de hace unos 300.000 años. La complejidad para llegar hasta la cámara donde fueron encontrados los huesos implicaba un intrincado recorrido de 80 metros, trepar paredes y descender por una angosta grieta hasta llegar a 30 metros de profundidad. En este caso, sin embargo, la ausencia de otros objetos simbólicos -como figuras talladas- o comportamientos -como pinturas rupestres- ponen en duda sobre si se trató de rito funerario o simplemente una acumulación de huesos realizada para ocultar los cuerpos en descomposición de los fallecidos a fines de no atraer animales carroñeros que pudieran poner en peligro a la comunidad.     

Para intentar confirmar si la formación de ambos yacimientos respondían a prácticas funerarias  o simplemente a una acumulación de huesos, un grupo de científicos realizó un estudio a partir de simulaciones informáticas de varios yacimientos de este tipo. Como conclusión los resultados fueron concluyentes respecto a que ambos casos podrían tratarse de acumulaciones de hueso casuales y, aunque se pueda afirmar con cierta confianza que fueron humanos los que arrojaron a sus congéneres a aquellos pozos, sigue siendo difícil asegurar que lo hicieron como parte de un ritual para facilitar su paso a otros mundos o para aliviar a sus deudos.

Finalmente, los indicios de una sepultura con intenciones rituales fueron descriptos en 1908 por dos curas católicos -los hermanos Jean y Amédée Bouyssonie- quienes descubrieron en la cueva de La Chapelle-aux-Saints, Francia, los restos de un neandertal de hace 50.000 años. Según ellos, la posición fetal en la que estaba el cuerpo y las herramientas que lo acompañaban apuntaban a un entierro intencionado. A principios del siglo XX los neandertales eran considerados primitivos. Sin embargo, la gran cantidad de hallazgos arqueológicos posteriores revelaron a los neandertales como una especie muy cercana al homo sapiens por lo cual se infiere que podrían haber incurrido en prácticas funerarias impulsadas por el simbolismo y producto de una capacidad de abstracción y previsión suficiente para asumir su propia mortalidad, la de sus congéneres y para actuar con la solemnidad que demanda ese conocimiento.

Fuente: El País

¿Fue el sexo con humanos la causa de la extinción de los neanterdales?

Por SINC

Un nuevo estudio de investigadores del Museo de Historia Natural de Londres apoya la hipótesis de que la mezcla con nuestros antepasados pudo haber sido una de las causas de la desaparición de los neandertales.

Investigadores del Museo de Historia Natural de Londres ahondan en un nuevo artículo en la idea de que que el Homo sapiens podría haber sido responsable de la extinción de los neandertales no por la violencia, sino por el sexo. El trabajo, publicado en la revista PalaeoAnthropology, plantea la posibilidad de que el mestizaje con nuestros antepasados podría haber reducido el número de neandertales que se reproducían entre sí, lo que habría provocado su eventual extinción.

Aunque hasta la fecha solo se han secuenciado 32 genomas de neandertales, por lo que es posible que la ausencia de ADN de Homo sapiens en su genoma sea en realidad una peculiaridad del muestreo, los autores esperan que los avances en la tecnología de secuenciación del ADN puedan resolver esta hipótesis al disponer de más genomas.

Cráneo de neandertal (a la izquierda) y de Homo sapiens (a la derecha). / © The Trustees of the Natural History Museum

Chris Stringer, jefe de investigación de evolución humana en el museo británico, es el autor del nuevo artículo junto con su colega Lucile Crété. Stringer señala que «nuestro conocimiento de la interacción entre Homo sapiens y neandertales se ha hecho más complejo en los últimos años. Sin embargo, todavía es raro ver una discusión científica sobre cómo ocurrió realmente el mestizaje entre los grupos«, subraya.

«Nuestro planteamiento es que una absorción continua de individuos neandertales en grupos de Homo sapiens podría haber sido uno de los factores que condujeron a la su desaparición», señala Stringer.

La hipótesis de los investigadores se basa principalmente en el hecho de que, aunque el 2 % del genoma humano procede de los neandertales, no hay pruebas de que los humanos hayan influido en el acervo genético neandertal.

Los investigadores destacan que «si los neandertales fértiles eran absorbidos regularmente por los grupos de Homo sapiens, también eran eliminados de las reservas genéticas de los neandertales, y una fuga tan constante de individuos jóvenes no es algo que pudiera mantenerse durante mucho tiempo en pequeños grupos de cazadores-recolectores».

El debate continúa abierto

«No sabemos si el aparente flujo genético unidireccional se debe a que simplemente no ocurría, a que la reproducción tenía lugar pero no tenía éxito, o a que los genomas neandertales que tenemos no son representativos», señala Stringer, ya que, recuerda, solo se han secuenciado completamente 32 genomas neandertales.

«A medida que se secuencien más genomas neandertales, deberíamos ser capaces de ver si algún ADN nuclear del Homo sapiens pasó a los neandertales y demostrar si esta idea es correcta o no», señalan los autores.

En el futuro, la investigación también podría analizar cuestiones similares relacionadas con otra especie de homínidos conocida como los denisovanos, lo que nos daría una idea más clara de cómo interactuaba nuestra especie con sus parientes más cercanos, concluyen los autores.

Referencia:
Chris Stringer et al. «Mapping Interactions of H. neanderthalensis and Homo sapiens from the Fossil and Genetic Records», PaleoAnthropology (2022). 

Fuente: SINC.