Notas

Para empezar vamos a agrupar los discos en dos grandes grupos como ya lo vimos en la nota pasada: discos mecánicos y discos sólidos.  Pero dentro de estos dos grandes grupos podemos encontrar subgrupos que los diferencian aún más.  En los discos mecánicos podemos encontrar aquellos discos que se conectan con mediante interfaz IDE y los que se conectan mediante SATA.  Y en los discos sólidos podemos encontrar dos tipos de interfaz: SATA y M.2.  Veamos qué significa cada uno.

DISCOS MECÁNICOS: Como ya sabemos se refiere a un plato magnético que almacena los datos por sector, los cuales son leídos a través de un brazo mecánico con un sensor que va a cada sector a buscar la información solicitada.  Ahora bien, el tipo de conexión es la que nos interesa.

Conexión IDE: La sigla deriva de su nombre en inglés Integrated Device Electronics (Electrónica de Dispositivos Integrados, traducido al español).  Fue una de las primeras interfaces de conexión para las unidades de almacenamiento y fue desarrollada por la marca Western Digital, una de las más emblemáticas fábricas de discos rígidos que tenemos en la actualidad.

Este tipo de interfaz se conecta a la placa madre (motherboard) a través de una cable plano de 40 pines, el cual determina el modo de envío de datos, conocido como Paralelo.  Es decir, el cable plano está compuesto por varios canales a través de los cuales se transmite la información.  Esta forma de transmisión de datos es lenta ya que el procesador no puede ejecutar su función hasta que lleguen todos los datos que viajan por los distintos canales del cable.

La interfaz IDE nos permite conectar hasta dos dispositivos con el mismo cable y en un solo puerto de conexión de la placa madre.  El cable posee 3 conectores, uno en cada extremo y otro más cerca de otro de los extremos.  Esos dos conectores se utilizan para conectar los dispositivos.  La interfaz IDE permite la conexión no sólo de discos rígidos sino también lectoras o grabadoras de CD/DVD.

Una de las complicaciones que tiene este tipo de interfaz es que debemos configurar físicamente el dispositivo al conectar.  Esto lo realizamos a través de pequeños puentes (jumpers) que se ajustan para determinar qué categoría cumple cada dispositivo.  Las categorías se denominan Maestro, Esclavo o Cable Select dependiendo la cantidad de dispositivos conectados en cada cable.  Este panel de configuración se encuentra al lado del conector del cable en cada dispositivo IDE.

La categoría de dispositivo maestro significa que es el principal dispositivo conectado y va en el extremo del cable, mientras que el término esclavo se refiere al segundo dispositivo conectado en el mismo cable y va en el segundo conector.  De esta forma podemos conectar ambos dispositivos en el mismo cable sin que entren en conflicto entre ellos.  Por último la categoría cable select es utilizada cuando tenemos un único dispositivo conectado por cable, haciendo que la BIOS de la placa madre determine cuál es el dispositivo principal y cuál el secundario.

Los discos IDE como dijimos son de velocidad lenta a comparación de los otros discos, variando su velocidad entre los 33MB/s hasta los 133MB/s.

Conexión SATA: Los discos mecánicos SATA funcionan de la misma manera que los IDE, la diferencia entre ellos radica en la interfaz de conexión.  Por su sigla en inglés SATA significa Serial Advanced Technology Attachment (Conector de Tecnología Avanzada en Serie, traducido al español) y a diferencia del IDE transmite la información en forma seriada en lugar de paralelar.  Es decir, la información viaja en serie en un solo bloque, lo que hace que la velocidad de transferencia sea mayor ya que viaja toda junta por un mismo canal.  Los dispositivos SATA (tanto discos rígidos como lectoras o grabadoras de CD/DVD) se conectan mediante un cable individual, de esta forma se deja de lado la configuración física que tenían los IDE, teniendo un solo dispositivo por conector.

A medida que fue evolucionando la tecnología, la velocidad de transferencia de la interfaz SATA fue creciendo también, al igual que su frecuencia de trabajo, desde los primeros cables SATA I hasta llegar al actual SATA III:

DISCOS SÓLIDOS: La diferencia en funcionamiento con los discos mecánicos es la forma de almacenar los datos.  En estos discos se deja de lado los sectores físicos y se utilizan bancos de memoria como los pendrives.  Tenemos 2 tipos de interfaz para estos discos: SATA y M.2 (que a la vez se subdivide en SATA y NVMe).

La velocidad de estos discos está determinada por la cantidad revoluciones por minuto (RPM) en que giran los platos internos.  Actualmente la velocidad estándar de los discos que podemos encontrar en cualquier computadora es de 7.200 RPM, pero los utilizados en servidores pueden llegar a tener una velocidad de hasta 15.000 RPM.

Los discos mecánicos suelen ser más lentos en arrancar y a veces podemos escuchar algún ruido interno debido a las partes internas de las que está hecho, pero hoy en día continúan utilizándose en muchas computadoras como así también en consolas de juegos o sistema de videovigilancia.  Su tecnología permite que lleguemos a tener discos rígidos de 40TB o incluso más, siendo más utilizados hoy en día como unidades de almacenamiento y no tanto como discos principales para instalar sistemas operativos o programas.

Fotos: Pexels y Depositphotos 

¿Qué es un teclado de membrana?

Los teclados de membrana son los más comunes utilizados en todas las computadoras de escritorio o notebooks.  Son teclados compactos, chicos, livianos, silenciosos y con una muy buena durabilidad.  Su funcionamiento se basa en tres pequeñas capas de membrana flexible debajo de las teclas, las cuales están unidas en una misma capa de goma. La principal característica de estos teclados es que para que la tecla que presionamos funcione, debemos ejercer una presión a fondo, es decir, que no alcanza con empezar a presionar la tecla para que el comando se ejecute, sino que debemos llegar al fondo con la presión.

Este tipo de teclados suelen verse en la mayoría de los equipos para uso hogareño o de oficina.  Tienen la ventaja de ser silenciosos, lo cual permiten tomar notas en reuniones sin la molestia del ruido constante de las teclas.  Su vida útil va de 5 a 10 millones de pulsaciones dependiendo la calidad de teclado que tengamos.

Como en todo componente tecnológico, tenemos mucha variedad para elegir en este tipo de teclados, aunque no va a variar mucho en la funcionalidad final.  Es decir, no vamos a encontrar en teclados de membrana más que variedades estéticas en cuanto al tamaño y colores en general.  La variedad se va a ver más en los precios y durabilidad del material con el que esté hecho, aunque hoy por hoy todos los teclados de membrana que hay en el mercado son de buena calidad.

¿Qué es un teclado mecánico?

A diferencia de los de membrana, no son muy comunes en equipos destinados a trabajos cotidianos como los de una oficina o una casa, sino que se usan más para juegos.  Podemos decir que cuando hablamos de un teclado mecánico estamos hablando de un teclado gamer.  Estos teclados funcionan con un switch o interruptor individual para cada tecla, es decir que si sacamos una tecla vamos a ver un switch específico para esa tecla, a deferencia del teclado de membrana donde la tecla presiona un punto específico de un circuito integrado.  Este tipo de tecnología hace que sea más fácil la reparación, ya que si se nos rompe una tecla, sólo debemos reemplazarla, mientras que en los de membrana estamos casi destinados a cambiarlo por completo.  Además cuentan con tecnología antighosting que impide que el teclado se bloquee si presionamos varias teclas a la vez.

Los teclados mecánicos son en su mayoría mucho más grandes que los de membrana, con teclas más amplias y separadas entre sí y son mucho más ruidosos que los de membrana debido a su tecnología de funcionamiento.  Su vida útil es mucho más prolongada dándonos un promedio de 50 a 70 millones de pulsaciones.

En este tipo de teclados vamos a encontrar mucha más variedad que va más allá de los tamaños y colores generales.  Vamos a encontrar teclados que remarcan con un color distintivo las teclas que más se usan para los comandos básicos de los juegos, además tendremos teclados con retroiluminación que va variando de color aleatoriamente para poder utilizarlos en la oscuridad.  La mayoría trae teclas multimedia que nos van a dar acceso rápido a distintas funcionalidades de la compu como por ejemplo el explorador de internet, subir y bajar el volumen, el brillo de la pantalla y otras funcionalidades.

En cuanto a los costos tenemos mucha variedad, pero podemos conseguir un buen teclado mecánico para juegos a un precio accesible.  Hay marcas como Noga y Trust que tienen buenos productos a muy buen precio, al igual que la gama de entrada de Genius o EVGA por nombrar algunas.

¿Y los mouses?

Así como hay distintos tipos de teclado también tenemos distintos tipos de mouses, aunque su diferencia de funcionamiento no sea tan marcada como en los teclados.  En los mouses las diferencias las vamos a encontrar en otro lado.

La primer diferencia que salta a simple vista entre un mouse convencional y uno gamer es su forma: mientras que los convencionales tienen la misma forma (aunque con mínimas diferencias) independientemente de la marca o tamaño, los gamer se destacan por su forma ergonómica y más robusta.

Otra de las diferencias se basa en la cantidad de botones que trae cada uno de los modelos.  Los mouses gamers tienden a traer botones laterales programables para complementar la jugabilidad.

Al igual que los teclados, estos mouses diseñados para juegos cuentan con retroiluminación ideal para usarlos en la oscuridad.  Su rango de precios varía según las marcas y modelos pero también podemos encontrar buenos productos a precios razonables.

Conclusión

Para una buena experiencia en jugabilidad te recomendamos que apuntes a un teclado mecánico y un mouse gamer.  No sólo por la estética, sino por las funcionalidades y vida útil. Para usarlos en juegos los teclados mecánicos resultan mucho más rendidores que los de membrana, son más durables y tienen la ventaja de poder repararse sin cambiarlo por completo.  Están hechos específicamente para soportar el uso prolongado y la constante presión de las teclas.  Quizás sea un gasto un poco mayor que si compras uno convencional, pero a la larga el precio lo vas a amortizar en años y vas a tener menos dolores de cabeza cuando los estés usando.

Foto: Freepik > Foto de jugando videojuegos creado por DCStudio